miércoles, septiembre 20, 2006

PARLAMENTO

ASI DESPRESTIGIAMOS LA POLITICA

Debo partir diciendo que creo en la política y creo que la mayoría de los políticos desean el bienestar de sus conciudadanos.

Como me referiré al parlamento acotaré también que creo justo el sueldo y asignaciones que perciben los parlamentarios por su labor.

Sin embargo, como contrapartida, debo señalar que hay cosas que molestan y que hacen ver mal a los parlamentarios.

Los parlamentarios son trabajadores, de un carácter distinto, pero trabajadores al fin. Es por tanto inconcebible que puedan faltar a su trabajo en forma ligera sin recibir sanciones. Como cualquier trabajador, los parlamentarios debieran cumplir al menos las siguientes labores siendo controlados en forma objetiva y sancionados por incumplimiento.

1. Asistir a las sesiones de sala.

2. Asistir a las sesiones de comisiones.

3. Tener presencia real en sus Distritos o Circunscripciones.

En segundo lugar, los parlamentarios son trabajadores de alto nivel. Por tanto es inconcebible que no sean capaces de escucharse entre ellos y den el triste espectáculo de dejar hablar a uno mientras los demás conversan o se pasean por la sala (los que están adentro).

Enseguida, es inconcebible que muchos no se interioricen de los proyectos de ley y después de todo un trabajo de comisiones y sala salgan proyectos mal redactados e incoherentes. Sería útil para un mejor uso de las leyes que junto con su aprobación se sancionara también un preámbulo que indicara brevemente el objeto de la respectiva Ley y su sentido general, lo que constituiría un todo armónico con su texto y su historia fidedigna.

Por último, es penoso que haya discusiones de proyectos en que se privilegie situaciones personales o locales cuando estas van en contraposición con los intereses de toda la nación. A este último tipo de casos corresponde la discusión acerca de la creación de dos nuevas Regiones, donde solo se busca eliminar rencillas locales creando más burocracia, en lugar de estudiar las características de las Regiones y su posibilidad de ejercer contrapesos con Santiago . Otro caso emblemático es la reforma al sistema binominal, donde la discusión se ha entrampado en la modificación de Distritos y Circunscripciones, lo que podría deteriorar algunas futuras candidaturas a la reelección, en lugar de analizar los problemas de fondo, como exclusiones o representaciones equivalentes.

Alejandro Jiménez Michaelis

1 comentario:

Paolo Tack dijo...

Me gusta mucho tu blog, y las palabras en el mismo tiempo revolucionaria y tranquilla,verdad, me gustaria mas que tu pueda hacer un confronto, muy istructivo, con my pais, Italia.
Hasta luego
Paolo Tacchini