lunes, abril 14, 2008

Santiago está obeso mórbido.


Creatividad en la solución de nuestros problemas.



Nuestra ciudad de Santiago está aquejada de una infinidad de problemas, la mayoría de los cuales tienen su origen en su crecimiento. Al respecto, un ejército de eficientes profesionales elaboran día a día nuevas "soluciones" para cada uno de los problemas, sesudas políticas públicas basadas en proyecciones del crecimiento de cada uno de estos grandes problemas, debidamente analizados. La tragedia es que una vez implementadas las "soluciones" siempre los problemas han ido creciendo más rápido que las "soluciones", cual inexorable Ley de Murphy.


Lo increíble de esta situación es que no se ve a nadie estudiando el origen de los problemas, que es el crecimiento en sí, en lugar de quejarnos de las externalidades que cada uno ocasiona.


Los mitos.

  • A tal fecha tendremos tal cantidad de habitantes en Santiago.
  • A esta fecha tendremos esta cantidad de vehículos circulando por nuestras calles.
  • A esta otra fecha los contaminantes de tal y cual tipo tendrán estos niveles.
  • A esta fecha deberemos aumentar en tanto las hectáreas construidas de la ciudad para dar cabida a la cantidad de nuevas viviendas necesarias.
  • Necesitaremos tales y cuales modificaciones en la locomoción colectiva.
  • Necesitaremos tales y cuales líneas de Metro.
  • Necesitaremos nuevas autopistas.
  • Deberemos tarificar las vías urbanas.
  • Restricción de 2 o 4 dígitos.
  • Necesitaremos tanta nueva energía.
  • Necesitaremos, necesitaremos, necesitaremos...

Concedamos que todas las proyecciones son correctas, que los estudios están correctamente ejecutados. Es cierto, todo eso sucederá si NO hacemos algo por impedirlo.


La solución

Tal vez todas las acciones proyectadas deban ser llevadas adelante, algunas más que otras. Sin embargo, la única forma de llegar en algún momento a vivir en una ciudad "vivible" es combatiendo decididamente la causa basal de los problemas, el crecimiento, o mejor dicho, este crecimiento.

Mientras no tengamos conciencia que Santiago tiene el doble de habitantes que los que puede cobijar, que su valle es finito, que los vientos tienen ciertas características y que el agua tiene otras, que necesitamos vegetación tanto para alimentar el cuerpo como el espíritu, no empezaremos a solucionar realmente nuestros problemas.

Nuestros mejores profesionales los necesitamos para revertir el actual crecimiento de Santiago, no para paliarlo. Es hora ya de mirar hacia el resto del país. Potenciar las Regiones es potenciar Santiago. Si pudiéramos graficar, Chile sufre de obesidad mórbida, la panza es Santiago y las piernas y brazos son las Regiones, ansiosas de poder fortalecer los músculos y dejar de alimentar la panza. ¿Qué será mejor para el obeso. Diseñar un auto que lo pueda contener mientras espera la muerte o curarle la obesidad?

El CRECIMIENTO verdadero, con mayúsculas, es homogéneo, permite a todo el país, a todos sus habitantes, progresar sobre bases sólidas, en armonía con la naturaleza.


Alejandro Jiménez Michaelis